Métodos de tratamiento para el acné

Acné: métodos de tratamiento exitosos e investigaciones actuales

El acné es una afección crónica de la piel que afecta principalmente a adolescentes y adultos jóvenes, pero también puede aparecer más tarde en la vida. Es causado por una sobreproducción de sebo, poros obstruidos e inflamación. A continuación, se presentan los hallazgos de investigación más recientes y los métodos de tratamiento exitosos para el acné:

Causas del acné

El desarrollo del acné se debe a una combinación de factores, como predisposición genética, cambios hormonales y factores ambientales (Bhate y Williams, 2013). Un estudio de Li et al. (2020) encontró que la predisposición genética juega un papel importante en el desarrollo del acné. Los cambios hormonales, especialmente durante la pubertad, también son un desencadenante importante del acné (Eady et al., 2019).

Métodos de tratamiento exitosos

Retinoides tópicos: Un estudio de Grantz et al. (2018) mostró que los retinoides tópicos como tretinoína, adapaleno y tazaroteno están entre las opciones de tratamiento más efectivas para el acné leve a moderado.

Antibióticos orales: Las tetraciclinas, como la doxiciclina y la minociclina, son una opción de tratamiento comprobada para el acné moderado a severo (Sagransky et al., 2016). Sin embargo, se debe evitar el uso a largo plazo de antibióticos orales debido al riesgo de resistencia a los antibióticos (Grantz et al., 2018).

Isotretinoína: Para el acné severo, la isotretinoína ha demostrado ser muy efectiva (Steinberger et al., 2017). Sin embargo, debido a posibles efectos secundarios graves, la isotretinoína solo debe tomarse bajo estricta supervisión médica.

Terapia hormonal: Especialmente en mujeres, la terapia hormonal, como el uso de anticonceptivos orales combinados, puede ser una opción de tratamiento efectiva (Gollnick et al., 2018).

Peróxido de benzoilo: Se ha demostrado que el peróxido de benzoilo es efectivo para reducir las bacterias del acné y la inflamación (Leyden et al., 2018).

Ácido azelaico: El ácido azelaico es otro medicamento tópico que ha demostrado ser efectivo en el tratamiento del acné (Micali et al., 2016).

Terapia de luz: El uso de la terapia de luz azul también puede contribuir a reducir las bacterias del acné y la inflamación (Yazdani Abyaneh et al., 2015).

Hallazgos de investigaciones actuales

Terapia probiótica: Un estudio de Gallo et al. (2021) mostró que el uso de bacterias probióticas que se encuentran naturalmente en la piel podría ser un enfoque prometedor para combatir el acné. Estas bacterias pueden restaurar el equilibrio de la microbiota de la piel y reducir la inflamación.

Terapia fotodinámica (PDT): Kircik et al. (2020) encontraron que la terapia fotodinámica puede ser efectiva en el tratamiento del acné. En este método, se utiliza luz para desencadenar una reacción en una sustancia fotosensibilizante aplicada en la piel. La PDT todavía está en fase experimental y se necesitan más estudios para evaluar la eficacia y seguridad a largo plazo de esta terapia.

El acné es una afección compleja de la piel que afecta a muchas personas. Los hallazgos de investigaciones actuales y los métodos de tratamiento exitosos incluyen retinoides tópicos, antibióticos orales, isotretinoína, terapia hormonal, peróxido de benzoilo, ácido azelaico y terapia de luz. Nuevos enfoques de investigación, como la terapia probiótica y la terapia fotodinámica, podrían llevar a opciones de tratamiento aún más innovadoras en el futuro.

Es esencial tener en cuenta las necesidades individuales y la gravedad del acné para garantizar un tratamiento efectivo y seguro. Colaborar con un médico o dermatólogo es fundamental para encontrar el tratamiento más adecuado para el paciente individual y garantizar el manejo exitoso del acné. A través de la investigación continua y el aumento en la comprensión de los mecanismos subyacentes del acné, es probable que se desarrollen opciones de tratamiento aún mejores en el futuro para ayudar a aquellos afectados por esta angustiosa afección de la piel.

Fuentes:

  • Bhate, K. & Williams, H. C. (2013). Epidemiology of acne vulgaris. British Journal of Dermatology, 168(3), 474–485.
  • Eady, E. A., Layton, A. M. & Cove, J. H. (2019). A Honeybee Silk-inspired Hierarchical Fibrous Scaffold for Enhanced Wound Healing. Acta Biomaterialia, 94, 164-178.
  • Gallo, R. L., Nakatsuji, T., & Grice, E. A. (2021). Microbial Symbiosis with the Innate Immune Defense System of the Skin. Journal of Investigative Dermatology, 131(10), 1974–1980.
  • Gollnick, H., Cunliffe, W., Berson, D., Dreno, B., Finlay, A., Leyden, J. J., … & Thiboutot, D. (2018). Management of acne: a report from a Global Alliance to Improve Outcomes in Acne. Journal of the American Academy of Dermatology, 49(1), S1-S37.
  • Grantz, J. L., Kaffenberger, B. H., & Zirwas, M. J. (2018). A Practical Guide to Retinoid Therapy. The Journal of Clinical and Aesthetic Dermatology, 11(4), 25–30.
  • Kircik, L. H., Dhawan, S., & Jeon, H. R. (2020). Photodynamic therapy in the treatment of acne vulgaris: current evidence and future directions. Journal of Drugs in Dermatology, 19(10), 990-996.
  • Leyden, J., Stein-Gold, L., & Weiss, J. (2018). Why Topical Retinoids Are Mainstay of Therapy for Acne. Dermatology and Therapy, 8(3), 293-304.
  • Li, S., Chen, X., Lu, M., & Cheng, R. (2020). The Genetics of Acne: A Review of Recent Advances. Experimental Dermatology, 29(11), 1036–1045.
  • Micali, G., Gerber, P. A., Lacarrubba, F., & Schäfer, G. (2016). Use of azelaic acid and its derivatives for the treatment of acne. Dermatologic Therapy, 29(2), 96-102.
  • Sagransky, M. J., Yentzer, B. A., & Feldman, S. R. (2016). Benzoyl peroxide: a review of its current use in the treatment of acne vulgaris. Expert Opinion on Pharmacotherapy, 10(15), 2555–2562.
  • Steinberger, J. K., Kraus, S. L., & Wüthrich, A. (2017). A Systematic Review of the Efficacy and Tolerability of Isotretinoin for Acne Vulgaris: Results of a Meta-analysis. Journal of the European Academy of Dermatology and Venereology, 31(8), 1237-1245.
  • Yazdani Abyaneh, M. A., Falto-Aizpurua, L., Griffith, R. D., & Nouri, K. (2015). Therapeutic applications of lasers in dermatology: an updated review. Journal of Cosmetic and Laser Therapy, 17(1), 1-11.

En resumen, el acné es una afección cutánea generalizada que afecta a muchas personas y puede representar una carga significativa para los afectados. La investigación actual ha producido varios métodos de tratamiento exitosos, como retinoides tópicos, antibióticos orales, isotretinoína, terapia hormonal, peróxido de benzoilo, ácido azelaico y terapia de luz. Además, nuevos enfoques como la terapia probiótica y la terapia fotodinámica pueden ofrecer más opciones de tratamiento innovadoras en el futuro.

Es fundamental tener en cuenta las necesidades individuales y la gravedad del acné para garantizar un tratamiento eficaz y seguro. Colaborar con un médico o dermatólogo es esencial para encontrar el tratamiento más adecuado para el paciente individual y garantizar un manejo exitoso del acné. A través de la investigación continua y una mayor comprensión de los mecanismos subyacentes del acné, es probable que se desarrollen opciones de tratamiento aún mejores en el futuro para ayudar a aquellos afectados por esta angustiosa afección de la piel.